El vocero presidencial, Manuel Adorni, calificó este viernes al paro general de la Confederación General del Trabajo (CGT) como la medida “más débil de la historia”.
El funcionario agregó que “fue un absoluto fracaso”, y que evidenció la batalla cultural que encarna el Gobierno, que enfrentó “lo peor del pasado y la esperanza del futuro”.
“La marcha de los argentinos hacia la libertad es irrefrenable”, adelantó el vocero en su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada.
Además, en un mensaje al sindicalismo, aseguró que los referentes deben “tomar nota de que los tiempos en la Argentina cambiaron y que la sociedad no quiere más ni amenazas ni extorciones”.
“Ayer lo único que hizo fue generar que la gente no tenga un plato de comida arriba de la mesa”, agregó.
“Esta semana los argentinos fuimos testigos de dos escenarios muy distintos que grafican la batalla cultural que estamos enfrentando”, afirmó, y agregó: “Por un lado, la Argentina próspera: el Presidente Milei disertando en la conferencia anual del Instituto Milken, donde se reunió con algunos de los empresarios más importantes del mundo, entre ellos Elon Musk, quien recomendó invertir en el país”.
A eso, el vocero contrapuso “los espasmos de la Argentina de la servidumbre: patotas de delincuentes apretando a trabajadores, cubiertas de colectivos pinchadas y sindicatos tratando de tomar fábricas, con las mismas figuras de siempre arrogándose la representación de los trabajadores que suelen despreciarlos”.
Por último, el funcionario planteó que “gracias a la voluntad y a las ganas de trabajar de los argentinos, fue el paro más débil de la historia”.
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