En su editorial de la Agenda Económica, Guillermo Willy Kohan analizó el presente del ministro de Economía en el gobierno y en medio de una crisis política.
Estamos frente a un escenario de radicalización política en que ha entrado al Gobierno. Lo más llamativo es que quien se ha colocado al frente de esa radicalización es el ministro de Economía Martín Guzman.
Se suponía que venía a integrar lo que alguna vez llamamos el ala occidental del Gobierno.
Después de lo que ha sido la recuperación democrática, que un ministro de Economía que nadie eligió venga a decir que la oposición en Argentina que acaba de ganar las primarias “es anti argentina”. Si el presidente de la Nación tiene autoridad hoy mismo lo tiene que mandar de vuelta a la Universidad de Colombia.
Ya son expresiones inaceptables en un régimen democrático. Por otra parte estamos viendo un ministro de Economía que para esconder su estrepitoso fracaso en la gestión sale a decir tonterías.
Martín Guzmán se ha puesto al frente de esta radicalización tan curiosa del gobierno que en nada contribuye a tranquilizar los ánimos sino todo lo contrario.
El ministro de economía posiblemente para seguir en el gobierno ha elegido ponerse al frente de la radicalización. Si Alberto Fernández tuviera autoridad hoy mismo tendría que mandar a Guzmán a Columbia.
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