El presidente electo Javier Milei aterrizó este lunes en Nueva York, Estados Unidos, en su primer viaje al exterior tras el triunfo en el balotaje y, en su primera parada, visitó “El Ohel”, la tumba del rabino Menachem Mendel Schneerson.
El líder de La Libertad Avanza viajó con su hermana Karina, quien será la Secretaria General de la Presidencia, Nicolás Posse, el designado jefe de Gabinete, y Santiago Caputo, su principal asesor.
En tanto, Luis “Toto” Caputo, quien sería ministro de Economía, Gerardo Werthein, posible embajador en Estados Unidos, y Mark Stanley, embajador norteamericano en Buenos Aires, completan la delegación.
A media mañana, el presidente electo ingresó al cementerio de Montefiore acompañado por su hermana, Werthein y Stanley. Allí realizó su primera actividad en Manhattan, de tinte “personal” y vinculada a los deseos de Milei de realizar la conversión final al judaísmo. Por este motivo, asistió a la tumba del reconocido rabino Menachem Mendel Schneerson, también conocido como el Rebe, el séptimo y último Rebe de Jabad Lubavitch, una rama del judaísmo jasídico.
Tras dedicar varios minutos a la lectura de salmos frente féretro del reconocido rabino, el único en manifestarse al abandonar el lugar fue Werthein, quien brevemente confesó que se trató “un momento de mucho emoción”.
Schneerson fue un líder carismático y pensador religioso prolífico que convirtió a Jabad Lubavitch en una de las organizaciones judías más influyentes del mundo. Se destacó por su enfoque de la Torá y el judaísmo como una guía para la vida cotidiana.
También fue un defensor de la educación judía y de la difusión de la cultura judía, fundó escuelas y organizaciones para promover la educación y la difusión de la cultura judía.
No es la primera vez que Milei visita a la tumba del “Rebe de Lubavitch”, ya que, en julio de este año, previo a las PASO, estuvo en el cementerio de Montefiore y por eso se mostró decidido a volver a modo de agradecimiento.
Industriales Pymes mostraron preocupación por la apertura de importaciones: podrían cerrar 25 mil empresas